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Vicen ha aprendido que la verdadera belleza comienza con una mentalidad positiva y un corazón agradecido. Al enseñar a sus clientes a practicar el autocuidado y la autoaceptación, Vicen no solo embellece el exterior, sino que también fomenta un bienestar interior duradero. Esta filosofía de vida, que celebra la responsabilidad personal y la energía positiva, se refleja en cada producto que crea, buscando siempre empoderar y elevar a quienes lo usa. Esta filosofía se convirtió en la piedra angular de su enfoque hacia la belleza y el bienestar. la belleza no es solo algo que se ve, sino algo que se siente
Después de probar miles de productos a lo largo de los años, Vicen decidió que era momento de compartir su conocimiento y pasión a través de su propia línea de cosméticos. Quería crear productos que encapsularan todo lo que había aprendido y amado, productos que no solo fueran efectivos sino también auténticos y accesibles para todos.
Con una visión clara y un corazón lleno de pasión, Vicen , con el apoyo incondicional de su familia lanzó Alma de Baróa, una línea de productos de belleza y bienestar que reflejan su profundo compromiso con la calidad y la honestidad. El nombre de la marca tiene un significado muy especial para su creadora, y quiere compartirlo con todos vosotros.
Representa la esencia, aquello que nos define y nos hace únicos. Es el corazón de todo lo que se hace en este proyecto, y para ella, es el símbolo de autenticidad y pasión.
Por otro lado, es un nombre profundamente personal. Se forma a partir de las primeras sílabas de los apellidos de sus padres, que son también los suyos y los de sus hermanos, junto con la inicial del nombre de su hijo. De esta manera, Baróa es un tributo a toda su familia, a sus raíces y a la herencia que comparten.